Uno de los mejores esp?as del mundo era de origen franc?s y se llamaba Richebourg.
Su secreto resid?a en su altura, unos escasos 58 cent?metros que le val?an para disfrazarse de beb? y as? cruzar las l?neas enemigas en brazos de una colaboradora en la ?poca de la Revoluci?n Francesa.